Los frecuentes incrementos en el precio de la gasolina hacen aún más importante que verifiques que tus vehículos estén recibiendo la cantidad y calidad correcta de combustible.
¡Mantente alerta!
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) proporciona información sobre las estaciones de servicio en las que se han encontrado irregularidades, así que una buena primera medida de prevención es que revises frecuentemente sus listados.
Hay muchas formas de adulterar el combustible: puede ser añadiéndole agua o disolvente, o bien, no agregando agentes lubricantes.
El combustible adulterado causa daños tanto a la bomba de gasolina como al motor, así que cuando un vehículo presenta problemas y se sospecha de adulteración, es necesario desmontar el motor para confirmar que se deba a la gasolina.
La adulteración también causa problemas de arranque, apagones y daños a los sistemas eléctricos como el software y el display.
Medidas de prevención:
- Pide gasolina en litros cerrados y no en pesos. Para hacer esto correctamente, es necesario conocer la capacidad del tanque de tu vehículo.
- Asegúrate de que las bombas despachadoras cuentan con un sello actualizado de verificación de la Profeco. Si acudes por primera vez a una estación, puedes pedir que te lo muestren.
- Como las gasolineras cuentan con tres niveles de velocidad de despacho, debes pedir siempre que llenen el tanque en el nivel 1, el cual suele presentar menos irregularidades en las verificaciones.
- Verifica que la manguera no esté húmeda, pues si tiene goteras, estarás recibiendo menos gasolina de la que pagas.
- Es recomendable que llenes de nuevo el tanque antes de que el indicador llegue a la mitad, pues mientras más aire tenga, más rápido se evaporará la gasolina y rendirá mucho menos.
- Mantén tu atención en la pantalla de la bomba, mientras cargas gasolina, para cerciorarte de que marque ceros al inicio y también de que avance de manera lógica y no se “salte” números.